El segundo día de la borrasca Filomena en Madrid ha dejado estampas mágicas en el centro de la capital. Un cielo azul y los primeros rayos de sol del domingo animaban a recorrer las calles del centro capitalino. La puerta de Alcalá, nos ha saludado nada más salir del metro Retiro con la mágica nieve.



Estaba llena de gente dispuesta a disfrutar del domingo haciendo selfies y caminando por los alrededores de un Retiro aún cerrado. Los puttos o querubines sentados en el friso de la puerta de Alcalá, aún conservaban restos de nieve.
Seguro que no sabías que Carlos III los colocó ahí para dejar un mensaje al pueblo de Madrid. Los 4 puttos representan la fortaleza, la prudencia, la templanza y la justicia. Y así es como esperaba que actuase la población madrileña si venían mal dadas o tiempos difíciles. Consejo paternal para este 2021 que aunque pase la borrasca Filomena en Madrid, todavía asoma complejo por la Covid-19.
La diosa Cibeles, con la puerta del Alcalá de fondo ha sido otro de los lugares elegidos para las fotos. No ha sido difícil llegar hasta ella, gracias a la labor de los quitanieves.



A primeras horas del domingo han limpiado algunos tramos de la C/ Alcalá, hasta llegar a la puerta del Sol. Así hemos podido caminar tranquilamente, sin miedo a resbalar y caer. Aunque algunos precavidos han salido de casa, incluso con sus crampones de montaña.
En la C/ Alcalá, antes de llegar a la Puerta del Sol un hombre con su chelo acompañaba la estampa de nieve con sus suaves acordes. Las decoraciones navideñas, todavía sin retirar, dejaban una estela de sueños pendientes.
El Imagine de John Lennon sonaba de fondo en la Puerta del Sol. Otro grito de esperanza que ha traído Filomena a Madrid. Y por si a estas alturas del trayecto necesitabas calentarte, la Mallorquina había preparado, chocolate o café con bollos.
Y nuestro recorrido acaba en la plaza Mayor, que atisbamos a través de uno de sus majestuosos arcos. Allí la nieve ya había comenzado a helarse, avisando que era tiempo de regresar a casa.


